¿Te gustaría tener una sonrisa perfecta? Consejos para una correcta higiene bucodental

...

¿Te gustaría tener una sonrisa perfecta? Consejos para una correcta higiene bucodental

¿Quieres saber cómo conseguir una sonrisa más bonita? ¡Una sonrisa es el mejor complemento que puedas usar y hace juego con todo!

Para tener una sonrisa bonita, sana y limpia debemos tener establecido el hábito de higiene diaria, hábito que hace que mantengamos los dientes blancos y sanos, una boca saludable y un buen aliento. Con ello, no solo evitamos el riesgo de enfermedades bucodentales, como la gingivitis, o la caries, sino que, una buena salud oral es reflejo de una buena salud en general.

La higiene bucal es una rutina diaria a la que debemos dar tanta importancia como al resto de nuestra higiene corporal. Como cualquier hábito requiere de un aprendizaje para conseguir que se convierta en algo rutinario. Por ello siempre insistimos, aunque al principio cueste, hay que motivar a los niños para que adquieran cuanto antes el hábito.

Normalmente, el acto de cepillarnos los dientes lo realizamos de manera rutinaria, por lo que no es fácil saber si estamos realizando una higiene adecuada, por eso queremos aclarar tus dudas a través de una serie de consejos que te ayudarán como guía en tu cuidado diario.

Una piel sensible nunca va a dejar de serlo, pero si la cuidas y utilizas los productos adecuados, notarás la piel mucho menos reactiva.

Sigue esta lista de buenos hábitos y lucirás una sonrisa radiante por mucho tiempo:

Cepíllate los dientes y encías todos los días después de cada comida

Es importante que adoptemos como costumbre cepillarnos los dientes una vez hayamos terminado de comer. Puede que no nos demos cuenta a simple vista, pero se acumulan en nuestros dientes restos de comida que es necesario eliminar. La base de un cepillado correcto consiste en realizar movimientos cortos, suaves y elípticos, teniendo en cuenta la línea de las encías, los dientes posteriores y las zonas que rodean las coronas de los dientes y obturaciones.

Dedícale el tiempo necesario al cepillado

Un error muy común es realizar un cepillado dental demasiado breve. Si no invertimos el tiempo necesario en el cepillado, puede que las cerdas del cepillo no lleguen a lugares de la boca que están más inaccesibles y en los que se están acumulando restos de comida.

Elige el cepillo de dientes adecuado

Hoy en día hay disponibles cepillos de dientes con multitud de formas y tamaños. Es importante que las cerdas de nuestro cepillo no sean excesivamente duras para que no dañen nuestras encías y el tamaño del cabezal tiene que permitir hacer los movimientos naturales del cepillado. O si tienes dudas, pregúntale a tu dentista, él te aconsejará cuál es el más indicado para ti.

Elige una pasta de dientes adecuada a tus necesidades

Actualmente se venden pastas de dientes para solucionar numerosos problemas bucodentales: con flúor, para prevenir la sensibilidad dental, para las enfermedades de las encías, dentífricos de efecto blanqueador… Nuestra recomendación es que sea tu dentista quien te asesore sobre el dentífrico más adecuado para ti.

Renueva tu cepillo de dientes

Es importante renovar el cepillo de dientes porque las bacterias pueden acumularse entre las cerdas. Si eres olvidadizo/a, los cambios de estaciones son un buen truco para acordarte de realizar el cambio.

Utiliza hilo o seda dental y/o los cepillos interproximales

Ambos utensilios son idóneos para complementar la labor de los cepillos y limpiar las zonas interdentales a las que los cepillos no puedan acceder.

Usa enjuagues bucales

El colutorio puede ser un gran aliado para eliminar bacterias que se han acumulado en la boca, tener un aliento agradable o para ayudar en la prevención o tratamiento de alguna enfermedad periodontal. Pero recuerda que el enjuague bucal es un complemento al cepillado, nunca podrá sustituir la limpieza dental.

No te olvides de limpiar la lengua

Es la parte más olvidada de la boca cuando estamos realizando la limpieza, pero la realidad es que en la lengua se acumulan miles de bacterias. Para una adecuada limpieza, se aconseja utilizar limpiadores linguales.

Acude a las revisiones con tu dentista

Las visitas de revisión con tu dentista son la mejor medida preventiva para detectar cualquier enfermedad o problema bucodental y poder poner una solución o tratamiento a tiempo. Realízate una limpieza dental al año.

Lleva una dieta equilibrada

Una dieta saludable es esencial para tener unos dientes y unas encías saludables. Una dieta rica en cereales, frutas y verduras y productos lácteos proporcionará todos los nutrientes necesarios. Evita alimentos excesivamente azucarados

Deja de fumar

Fumar influye directamente, y de manera muy agresiva, en el cuidado bucal. Fumar aumenta el riesgo de enfermedad de las encías, provoca mal aliento, decoloración de los dientes y otros problemas tanto de salud oral como de salud general. Si no se abandona el hábito, es necesario reducirlo y realizar una limpieza profesional profunda de manera más frecuente, para revisar el estado de las encías y la acumulación de sarro.

Y… ¿si no nos realizamos correctamente esta higiene, cuáles son las enfermedades bucales más frecuentes?

Caries

La caries dental es una enfermedad bucodental que afecta casi al 100% de la población, tanto adultos como niños. En numerosas ocasiones, se da por supuesto que la aparición de caries es inevitable. pero es totalmente erróneo, dado que la caries es una enfermedad que se puede prevenir si se mantiene una buena higiene oral. Precisamente esa higiene oral deficiente es lo que produce que los tejidos del diente se vayan destruyendo, lo que puede causar graves consecuencias si no se acude al dentista a su debido tiempo.

Gingivitis

a gingivitis es una enfermedad periodontal en fase temprana y su aparición tiene una relación directa con la higiene bucodental. No te alarmes, es una enfermedad reversible Cuando una persona padece gingivitis, notará cómo sus encías están inflamadas y enrojecidas, pudiendo incluso producirse sangrado. De hecho, la aparición de sangre al lavarse los dientes es un signo de la aparición de esta enfermedad. Cuando una persona aprecia los síntomas, debe pedir cita a su dentista para que realice un examen en el que, le realizará limpieza bucal profesional y le tratará el problema

Periodontitis o piorrea

La periodontitis es una enfermedad periodontal en una fase severa y aparece cuando no se ha tratado a tiempo la gingivitis. Es más complicada de tratar que la gingivitis. En este caso, las bacterias se extienden por la línea gingival y llegan al hueso y a los tejidos que soportan al diente. Todo esto puede provocar unos signos que evidencia la enfermedad: recesión de encías, halitosis o mal aliento, provocando incluso la pérdida del diente. La periodontitis puede llegar a convertirse en una enfermedad periodontal crónica, por lo que acudir al especialista es vital para mantener la boca a salvo.

Halitosis o mal aliento

La halitosis o mal aliento está provocada, en su mayoría, por enfermedades periodontales de la boca, falta de higiene o por el consumo de tabaco. Es por eso que se debe incorporar a la rutina de higiene oral el uso de limpiadores linguales y así eliminar restos de suciedad y saburra lingual –capa de suciedad de aspecto blanquecino–.

Llagas y aftas

Es probable que hayas tenido alguna en algún momento de tu vida, ya que es una afección de lo más habitual. Son fácilmente reconocibles, ya que suelen tener una forma redonda de color blanco. Además, suelen aparecer en la lengua o en la cara interior del labio como consecuencia del roce de un objeto o tras habernos mordido y no son contagiosas. Su presencia no entraña ningún riesgo para la salud.

En la farmacia tenemos amplia variedad de productos para la higiene bucodental para tratar diferentes problemas, entre los que se encuentran:

No obstante, si aún tienes dudas que te podamos resolver no dudes en ponerte en contacto con nosotras, te las resolveremos encantadas.